«Una novela preciosa, tremendamente humana y emocionante, que describe las peripecias de una niña alemana de nueve años desde que es dada en adopción por su madre hasta el final de la guerra. Su nueva familia, gente sencilla y nada afecta al nazismo, le enseña a leer y a través de los libros Liesel logra distraerse durante los bombardeos y combatir la tristeza. Pero es el libro que ella misma está escribiendo el que finalmente le salvará la vida.» Érase una vez un pueblo donde las noches eran largas y la muerte contaba su propia historia. En el pueblo vivía una niña que quería leer, un hombre que tocaba el acordeón y un joven judío que escribía cuentos hermosos para escapar del horror de la guerra. Al cabo de un tiempo la niña se convirtió en una ladrona que robaba libros y regalaba palabras. Con esas palabras escribió una historia hermosa y cruel que ahora ya es una novela inolvidable.
Esta historia es realmente conmovedora, me ha encantado, prácticamente desde la primera pagina me ha enganchado, creo que una de las cosas que mas me han llamado la atención es el hecho de quien es el narrador de esta novela, que es la muerte.
Cuenta la historia de Liesel una niña a la que su madre da en adopción junto con su hermano, pero solo ella llega a la casa de su nueva familia, su hermano se queda en el camino, ese hecho marcara a Liesel durante muchos años, ya que vera a su hermano cuando se encuentra en algunas situaciones, y cree ver a su hermano felicitándola por lo que a hecho o reprochándola. Además sufre continuas pesadillas en las que todas las noches ve a su hermano. Desde el día de la muerte de este Liesel comienza a robar libros, no lo hace de manera continua al principio, pero mas adelante se convertirá en una necesidad.
Al principio la vida de Liesel es totalmente normal, juega con sus amigos a la pelota, da paseos con su padre, lee con el junto a la cama, pero todo esto ira cambiando, sobretodo cuando aparece Max, un judío al que tienen que esconder en su sótano. A partir de ahí la vida para la familia cambia, no pueden hablar con nadie sobre Max y en alguna ocasión se piensan que los han podido pillar. Tienen que guardar un gran secreto.
En la vida de Liesel también se encuentra Rudy, es su mejor amigo, y estará con ella siempre, incluido en algunos momentos duros para ambas familias.
Como he dicho antes esta historia me ha encantado, hay amor, amistad, y la cruda realidad, de como era en esa época la Alemania nazi.
He llorado como hacia tiempo que no lloraba con un libro. Lo recomiendo es una historia que hay que leer.
